Los dolores de cabeza se pueden manifestar de muchas maneras distintas y en diferentes grados. Por lo que puedes sentir desde tan sólo una ligera presión en tu cabeza hasta sufrir realmente una migraña. Existen diferentes causas para la aparición de dolores de cabeza. Estas pueden ir desde las puramente físicas, como lo puede ser una alergia que te provoca una sinusitis; a las psíquicas, como por ejemplo el estar preocupado. Las causas psíquicas, en concreto el estrés, son con mucha más frecuencia de lo que podamos pensar el origen de los dolores de cabeza. .
Los dolores de cabeza y el estrés
Son muchas las razones por las cuales puedes llegar a padecer estrés, y además con frecuencia esto va a dar lugar a la aparición de dolores de cabeza, ya sea de forma leve o con mayor intensidad. Por ejemplo puede ocurrir que hayas aceptado demasiada carga de trabajo y que estés estresado por todo lo que te queda por terminar. También puede ocurrir que estés preocupado por un problema para el que no logras encontrar solución. Las preocupaciones son a menudo el origen de nuestro estrés. Existe una diferencia notable entre pensar y preocuparse. Cuando piensas, estás también buscando una solución a un problema específico. Sin embargo cuando te preocupas, te quedas estancado en el mismo patrón de razonamiento, y esto llega a desgastar en gran medida tu mente y así puede dar lugar a los dolores de cabeza.
Los dolores de cabeza y la fatiga
Esto también se debe en definitiva al estrés, ya que hay que tener en cuenta que el estrés puede dar lugar a un sueño menos profundo o a tener problemas para conciliar el sueño. No obstante en este caso los dolores de cabeza van a conducir a un círculo vicioso. Cuando sufrimos dolores de cabeza, nos va a resultar más difícil entrar en las fases de sueño profundo, y esto a su vez puede llegar a provocar una fatiga física.
Los dolores de cabeza y la depresión
Los dolores de cabeza también son uno de los síntomas de la depresión. Al estar preocupados, algo que también nos suele suceder cuando tenemos depresión, existe la probabilidad de que empecemos a sufrir dolores de cabeza. Se ha llegado incluso a demostrar científicamente que la depresión en los adolescentes viene acompañada de dolores de cabeza. Estos dolores llegan a agotar la mente hasta tal punto que los senos craneales venosos se vuelven más sensibles y más vulnerables. Entonces es cuando el riesgo de que aparezcan los dolores de cabeza es mayor.
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