Los párpados son los primeros en notar los problemas del envejecimiento.
Los párpados son los pliegues de piel, superior e inferior, que cubren nuestros ojos, los protegen de agentes externos y los mantienen humedecidos mediante el parpadeo, distribuyendo uniformemente la película lagrimal.
Como otras partes del cuerpo, los párpados pueden padecer infecciones, procesos inflamatorios e inclusive desarrollar tumores. Pero hay otros problemas más específicos, secundarios al proceso de envejecimiento que sufren tanto la piel como los músculos de los párpados, que provocan una inadecuada posición de los mismos, un incremento de la laxitud de la piel, un parpadeo anormal y la aparición de las temidas bolsas en los ojos.
Las bolsas en los ojos se producen por un incremento de la laxitud del músculo y de la piel de los párpados, ya sea en los superiores o en los inferiores, que acaba produciendo el descolgamiento y adelgazamiento de los tejidos que rodean los ojos. Esto tiene como consecuencia la aparición de párpados abultados o hinchados.Son uno de los rasgos que más influyen en el envejecimiento prematuro del rostro, causando además que las personas que las sufren aparenten estar constantemente cansadas.
“Aunque existe una gran oferta en cremas y productos de belleza que ofrecen solución para estos problemas palpebrales, no existe evidencia científica probada de su utilidad a la hora de revocar sus efectos de forma permanente. En el mejor de los casos, algunos de ellos ofrecen un remedio momentáneo”.
“El único tratamiento verdaderamente efectivo a largo plazo es una intervención quirúrgica de tipo ambulatoria y que se realiza bajo anestesia local, denominada blefaroplastia”, añade. Esta intervención, la blefaroplastia, es la cirugía estética facial más común. Se realiza tanto en el párpado superior como el inferior para corregir el exceso de piel y, lo más importante, para reducir las bolsas de grasa.Esta intervención, la blefaroplastia, es la cirugía estética facial más común.
Se realiza tanto en el párpado superior como el inferior para corregir el exceso de piel y, lo más importante, para reducir las bolsas de grasa.
Son muchas las personas que deciden eliminar ese rasgo envejecedor del rostro, pero deben ser conscientes de que, de cara a obtener un resultado estético y funcional óptimo, es muy importante que la blefaroplastia la realice un especialista. Esto minimiza los riesgos y problemas postoperatorios secundarios a una inadecuada técnica quirúrgica, entre los cuales el más importante y difícil de corregir es el cierre incompleto de los ojos, que provocaría problemas importantes de sequedad ocular, además de conseguir una apariencia antiestética”.
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