El presidente Donald Trump anunció un ambicioso programa llamado TrumpRx, cuyo objetivo es bajar los precios de los medicamentos recetados en Estados Unidos mediante una nueva vía de compra directa al fabricante y la vinculación de precios con los países más competitivos.
Qué propone TrumpRx
- Creación de un portal gubernamental (TrumpRx.gov) que redirigirá a los consumidores directamente a los sitios web de los fabricantes para que compren medicamentos al por menor sin depender del seguro tradicional. 
- Establecimiento de precios basados en el principio de “nación más favorecida” (MFN, por sus siglas en inglés), lo que significa que EE. UU. intentará asegurar precios tan bajos como los de otros países desarrollados. 
- Acuerdos con farmacéuticas como Pfizer, que se comprometieron a ofrecer descuentos en ciertos fármacos, en contraprestación a incentivos como una exención temporal de aranceles sobre importaciones. 
Límites y desafíos del plan
- Aunque se anuncian descuentos “de hasta 50 % o más”, el beneficio real para la mayoría de los pacientes asegurados podría ser limitado, porque estos ya suelen tener copagos o mecanismos distintos al pago en efectivo. 
- La implementación del portal TrumpRx está prevista para principios de 2026, lo que significa que los efectos no serán inmediatos. 
- Para muchas empresas, el impacto depende de cómo se integren estos mecanismos en los planes de seguro, qué medicamentos estén incluidos y cómo manejen la logística de compra directa. 
Implicaciones prácticas
- Los consumidores podrían beneficiarse especialmente si no tienen seguro médico o tienen copagos muy altos, ya que la compra directa puede ofrecer mayor ahorro. 
- Las aseguradoras, los administradores de beneficios (PBM) y los empleadores tendrán que estar atentos al cambio en los modelos tradicionales de compra y descuentos de medicamentos. 
- Las farmacéuticas podrían verse presionadas a reajustar su estructura de precio global, lo que podría tener efectos también en otros países. 




