Un estudio reciente publicado en Nature Microbiology ha revelado un hallazgo crucial: los parásitos de la malaria, causantes de Plasmodium falciparum, pueden permanecer en el cuerpo durante años o incluso décadas sin causar síntomas. Esto ocurre porque desactivan ciertos genes y evaden el sistema inmunitario, permitiendo infecciones crónicas y silenciosas.
Claves del descubrimiento
P. falciparum desactiva la expresión de genes var que codifican proteínas adhesivas de superficie, haciéndose prácticamente “invisible” al sistema inmunitario.
Esto reduce la cantidad de proteína en la superficie de glóbulos rojos infectados, evitando su detección y filtrado por el bazo.
Se sintetizó un análisis a nivel unicelular para identificar poblaciones pequeñas de parásitos latentes que no expresan dichas proteínas.
¿Qué implica este hallazgo?
- Las personas pueden contagiar malaria años después de la infección, aunque parezcan sanas o no hayan estado expuestas recientemente.
- Las campañas de erradicación deberán incluir tratamiento masivo para casos asintomáticos, no solo para los infectados sintomáticos.
- Podrían desarrollarse fármacos que reactivan los genes var y “despengan” la invasión parasitaria, ayudando al cuerpo a detectarla.
Opiniones de expertos
Karine Le Roch (UC Riverside) describió el estudio como “riguroso, innovador y de gran impacto”, que resuelve un enigma de vieja data sobre infecciones crónicas asintomáticas.
Anna Bachmann (Instituto Bernhard Nocht, Hamburgo) concluyó que la capacidad del parásito para “esconderse” demuestra estrategias aún más sofisticadas de lo que se conocía.
Esta investigación revela un nuevo mecanismo de evasión inmunológica de P. falciparum y plantea un desafío para los programas de control de la malaria. Para combatir eficazmente la enfermedad, será esencial:
Incluir a personas asintomáticas en campañas preventivas.
Desarrollar nuevos medicamentos que desbloqueen los genes var.
Un paso decisivo hacia la meta de erradicar la malaria.