El neurocientífico Camilo de la Fuente, de origen chileno pero radicado en México, está liderando un cambio radical en la manera de diagnosticar y tratar los primeros episodios psicóticos. Su enfoque, en vez de solo reaccionar a síntomas evidentes, apuesta por la detección temprana, diagnósticos integrales y tratamientos personalizados.
Puntos destacados de su trabajo
De la Fuente dirige el Laboratorio de Psiquiatría Experimental en el Instituto Nacional de Neurología y Neurocirugía de México, donde aplica imágenes cerebrales avanzadas (espectroscopía, resonancia magnética) para investigar alteraciones neuroquímicas —especialmente la interacción entre dopamina y glutamato— presentes incluso antes de que se manifiesten clínicamente.
Ha implementado una clínica gratuita y especializada que brinda atención rápida (en menos de 24 horas) a jóvenes con síntomas psicóticos: incluyen tomografía, resonancia, análisis neuropsicológico, marcadores de inflamación, etc.
De la Fuente cuestiona el uso indiscriminado del diagnóstico de “esquizofrenia” como etiqueta única. Sostiene que hay diversos tipos de psicosis —algunos con síntomas positivos, otros con predominio de síntomas negativos o cognitivos—, y que tratarlos como si fueran iguales limita los resultados terapéuticos.
Por su innovación, obtuvo el Global Schizophrenia Award de la Schizophrenia International Research Society, siendo el primer mexicano galardonado con ese reconocimiento.
¿Por qué es importante este enfoque?
Porque permite intervenir cuando la enfermedad aún está en etapas tempranas, lo que puede cambiar drásticamente el pronóstico.
Porque se busca no solo aliviar los síntomas positivos (alucinaciones, delirios), sino también los negativos y los déficits cognitivos, que tienen gran impacto en la calidad de vida.
Porque promueve una visión más matizada de los trastornos psicóticos: desterrar etiquetas rígidas que agrupan condiciones heterogéneas. Esto puede ayudar también a reducir el estigma.
El trabajo de Camilo de la Fuente representa un paradigma más humano, preciso y efectivo en el tratamiento de los trastornos psicóticos. Su apuesta por la detección temprana, la personalización y el abordaje integral promete transformar tanto la investigación como la práctica clínica en salud mental en México y más allá.